«Todos los caminos llegan a Roma»

Conocida por ser la ciudad con más riquezas arquitectónica e históricas del mundo, la única capital con un estado extranjero en su interior, capital del imperio romano y por mil razones más, Roma es visitada por más de seis mil millones de turistas al año. Alberga tanta popularidad, que las guías sobre sus obligadas visitas son interminables, pero tras haberla visitado en innumerables ocasiones, os voy a contar como vivir la Roma exclusiva y secreta.

Mi sitio favorito para quedarme en Roma es en los alrededores de Piazza Navona, el barrio Parione. Me fascina quedarnos en el “LifeStyle Suites”, ya que tiene peculiares habitaciones con diferentes estilos, y las impresionantes vistas de su azotea, son uno de mis lugares escondidos preferidos. Cuando llegas cansado, después de haber caminado todo el día para ver los innumerables monumentos que forman esta preciosa ciudad, me encanta ir al rooftop a tomar un refrescante “aperol spritz” mientras contemplamos la cúpula de Santa Inés.

Cuando amaneces en Roma los deseos por conocer, descubrir, soñar, son insaciables. Pero antes de comenzar el recorrido, es imprescindible hacer un alto en “Barnun Cafè” para degustar una cremosa taza de cappuccino y acompañarlo de un piccolo corneto o croissant de crema, comme un vero italiano. Una vez has repuesto fuerzas, nos adentramos por el arco de Santa Margarita hasta llegar a la famosa plaza de Campo di Fiori, donde hay mercados de frutas y verduras locales expuestos, como antiguamente se hacían en las plazas de los pueblos y de las grandes ciudades. Cuando te sumerges, solo ves carismáticas sonrisas diciendo “Ciao bella” ofreciéndote deliciosas frutas para probar, nunca puedo resistirme a los llamativos y perfectos frutos rojos. Cuando quieres lavar la fruta para probarla, te das cuenta de que la ciudad está repleta de fuentes de agua potable ¡puedes encontrar una en cada esquina! fresca y limpia ayudan a soportar el calor, principalmente en los meses de verano.

Para conocer los monumentos más importantes de la ciudad, el histórico foro, la presumida Fontana di Trevi, la prepotente Piazza Navona, el aventurero Coliseo y la concurrida plaza de España necesitas al menos tres días, no hay ciudad en el mundo con tanta historia en cada rincón. Una de las cosas más bonitas que puedes hacer, es visitar la Fontana de Trevi de noche, cuando esta iluminada y ausente de turistas, ahí es cuando aprecias su verdadera belleza, y puedes pasar horas observándola perpleja. Me fascina visitarla, tras recorrer las preciosas calles de piedra, observar las pequeñas fuentes que nacen de las paredes y tras disfrutar de una buena pasta en uno de mis restaurantes preferidos “Rinaldi al Quirinale”.

Caminar por el gueto judío de Roma, envuelto por su historia y sus fascinantes callejuelas que con su aroma culinario te trasportan a la cultura Hebrea, hasta llegar a la plaza Mattei, nos lleva a descubrir una preciosa historia de un caballero enamorado. La fuente de las tortugas, con sus respetuosos elfos y carismáticas tortuguitas, cuenta la leyenda de que fue construida por el duque de Mattei para impresionar a su suegro, en una sola noche.

Un viaje escondido imprescindible y a su vez una maravillosa experiencia es alejarte del concurrido centro e ir a disfrutar de un precioso atardecer al jardín de los naranjos. Dejando atrás el solitario circo Massimo y ascendiendo por el sinuoso camino del monte Avelino llegas al majestuoso parque rodeado de murallas. Privilegiado por ofrecer una de las mejores vistas panorámicas de Roma, que entre sombras y claros perfuman la calma del ambiente sus característicos naranjos.

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Alojamientos:

http://www.lifestylesuitesrome.com/

http://www.romaluxushotel.com/

Restaurantes:

«Mimi e Coco»  http://www.mimiecoco.com/

«Rinaldi al Quirinale» https://www.rinaldialquirinale.it/

«La pérgola» https://romecavalieri.com/la-pergola/